Una chica tan delgada tiene un culo en miniatura. Le costó mucho tiempo resolverlo. Pero el negro no tenía tiempo para esperar. Después de la mamada, metió su perno en el culo de la chica. No sé lo que estaba pasando, pero creo que lo hizo muy bien. Después de ese mazazo en el culo, sumergirse en su coño fue como unas vacaciones. ¿Y por qué a esa chica morena le gustan los negros? ¿Tienen la polla más dulce o el esperma más sabroso?
Digámoslo así. Cada hombre se merece la mujer que tiene. En este caso, el marido es un holgazán. La mujer trajo al cabrón y en lugar de echar inmediatamente a la esposa y al amante de la casa, se limitó a decir unas frases de objeción que no tenían ningún peso entre esos dos. Una humillación aún mayor fue cuando, después de que su esposa había sido follada, cogieron y salpicaron de semen la cara del marido y éste volvió a dar una bofetada.